El lechero le mete un polvazo a la puta de un millonario
No siempre el dinero da la felicidad y esta puta de un millonario es muy infeliz aunque no le falta de nada. Realmente le falta lo más importante y es que un tío le eche un buen polvo, así que reza todos los días para vivir una aventura extramatrimonial con el primer tío que se cruce por su vida. Como es de costumbres tradicionales, prefiere que todos los días el lechero le lleve la leche recién ordenada de la vaca y pese a que nunca se había fijado en él, aquel día lo vio con otros ojos muy diferentes. Sin pensarlo lo invitó a entrar en su casa mientras ella se bañaba y al poco tiempo el tipo le estaba dando duro por detrás mientras ella lucía el flamante collar que le había regalado el ahora cornudo de su esposo.
